1 Megapíxel, 3 Megapíxeles, 4, 6, 10, 12, 14… Desde que la fotografía digital se popularizó, cada año los fabricantes aumentan los Megapíxeles de las cámaras prometiendo mayor calidad de imagen, pero esto en realidad es sólo una estrategia de Marketing.
Una de las características de la sociedad del siglo XXI es el consumo continuado de aparatos tecnológicos (en realidad el consumo continuado de todos los bienes). Cambiamos de móvil una vez al año, los televisores se quedan ‘obsoletos’ a los dos o tres años, los reproductores de archivos musicales pasan de moda cada seis meses y hasta los ordenadores parecen objetos de usar y tirar. La principal estrategia que utilizan los fabricantes y distribuidores de aparatos electrónicos para convencer a los consumidores de renovar sus aparatos es la de los avances en la tecnología.
Las pantallas de plasma hace 6 años eran una novedad con la que soñaba cualquier adicto a la tecnología, un par de años después la tecnología LCD se situó en la vanguardia y ahora parece que sólo las pantallas LED merecen la pena. En el caso de las cámaras fotográficas es más fácil: más Megapíxeles en cada ‘generación’ y los consumidores estarán locos por comprar una nueva.
La mayoría de los consumidores relacionan el número de Megapíxeles con la calidad de la imagen, pero en realidad no es un factor determinante. Es mucho más importante la óptica de la cámara; con una cámara de 3 Megapíxeles y un buen lente podemos obtener mejores fotografías que con una de 6 y con una óptica inferior.
Los anunciantes suelen utilizar el ejemplo de la fotografía ampliada para demostrar que a mayor número de Megapíxeles obtenemos una imagen más detallada, lo que no es completamente cierto ya que esto depende de otros factores como son la óptica, las condiciones en las que se tomó la foto, la iluminación, etc.
La cantidad de Megapíxeles especifica la resolución, término que a menudo es confundido con la calidad de imagen. La resolución se obtiene multiplicando los píxeles verticales por los horizontales, igual que se obtiene la medida del área de un cuadrado o rectángulo. La resolución afecta al tamaño de la imagen, no a su calidad. De hecho para los fabricantes es relativamente fácil aumentar la resolución ya que al obtenerse de una multiplicación, cualquier aumento en el número de píxeles aumenta notablemente la resolución.
Más interesante sería ver la integración real de las cámaras fotográficas en otro tipo de dispositivos, sobre todo en los teléfonos móviles y las tabletas. Desde hace tiempo se nos promete una era en la que sólo necesitamos un dispositivo móvil y todos nuestras pertenencias forman parte del Internet de los objetos, y aunque la revolución de lossmartphones ha acercado el panorama del dispositivo único (GPS, radio, agenda, reproductor de música, mando a distancia, etc.) mediante las aplicaciones móviles, casi todos estos smartphones hacen fotografías de menor calidad que las cámaras fotográficas.
fuente: http://goo.gl/tngRW