Fedora se ha caracterizado por ser una de las distribuciones que traen los último en Kernel y casi casi nos ofrece lo mejor del mundo opensource.
Después de algunos días de retraso del lanzamiento de la versión final de Fedora 20, cuyo nombre clave es «Heisenbug», después de esos días de espera que ya se han hecho casi costumbre, por fin se lanzó la versión y la espera ha valido la pena.
La nueva versión tiene mejoras en la máquina virtual, además de la actualización de sus entornos de escritorio como GNOME Y KDE: Pero una de las cosas por la cual Fedora parece haberse vestido de gala mostrando lo mejor de sí, es el soporte que le ha sumado para procesadores ARM. El soporte a los procesadores ARM no es poca cosa, pues ahora ya cabría la posibilidad de llevar un Fedora en una tablet o smartphone.