La competencia entre ATI (ahora parte de AMD) y NVIDIA por crear el procesador gráfico más rápido del mundo siempre está al rojo vivo. Cada pocos meses una empresa sale a disputar el trono de la otra como el fabricante que ofrece los componentes más avanzados y capaces de reproducir en su máxima gloria los juegos y programas de edición más exigentes. Hoy hay un cambio en la corte real de las tarjetas gráficas, pero no es tan claro como puede parecer.
No hay duda al respecto, la nueva AMD Radeon 6990 que llegó hoy al mercado estadounidense por el apabullante precio de 699 dólares ( 1’300.000 pesos) es la tarjeta más veloz del mundo. Tiene 4 GB de RAM GDDR5 (un tipo de memoria ultra veloz y costosa que está optimizada para gráficas) 4 salidas de ‘mini display’, una de DVI y tiene una cámara de enfriamiento líquido para que semejante potencia no derrita la silicona. Toda esta tecnología viene en un bloque de 30 centímetros de largo, así que los interesados necesitarán una torre enorme para embutir a esta bestia.
Volviendo al rendimiento, es claro que ninguna tarjeta puede competirle a la nueva 6990, pero no porque tenga el procesador más rápido. La tarjeta usa 2 procesadores que pertenecen a la familia Cayman de Radeon, es decir, los mismos que se encuentran en el resto de la serie 690XX y que son inferiores al nuevo procesador de NVIDIA que da vida a la tarjeta GTX 580 (esto se puede ver en varios ‘benchmarks’independientes, donde queda claro que ninguna tarjeta con un solo procesador supera a la GTX 580).
Esta es una comparación oficial de algunas de las tarjetas que más compiten con la Radeon 6990.
En términos sencillos, no hay quién se le mida en rendimiento de tú a tú a la 6990 cuando de una sola tarjeta se trata. Todas las pruebas iniciales de otros medios demuestran la superioridad del nuevo producto de AMD en comparación a la NVIDIA GTX 580 o la Radeon 5970 (otra tarjeta que usa dos procesadores). Puede que haya un procesador mejor –como parece ser el caso con lo que ofrece NVIDIA– pero no hay una tarjeta más rápida que la Radeon 6990.
Aunque no hay que restarle importancia a la ingeniería de la tarjeta 6990, vale la pena comentar lo que implica adquirir una tarjeta así. Por su enorme poder, esta belleza va a necesitar una fuente de energía bastante generosa, más aún si el computador en el que va está lleno de componentes que también tragan mucha electricidad, como pueden serlo memorias y procesadores de alto rendimiento. En otras palabras, para comprar una 6990 hay que estar seguro de que la fuente del computador va a dar a basto, so pena de quemar su nuevo juguete por falta de energía.
También hay que resaltar que, al tener dos procesadores en una sola placa de silicona, el aparato es de por sí más delicado y puede estar más a la merced de un funcionamiento pobre o con errores. Puede ser incluso buena idea reemplazar el sistema de enfriamento de fábrica (el cual ya ha sido catalogado como muy ruidoso) por uno más discreto y efectivo, aunque eso le sumaría al ya tenebroso precio de la 6990.
¿Piensa comprar esta nueva joya de la corona de AMD, o va a esperar a ver qué muestra NVIDIA cuando revele próximamente la GTX 590? ¿Cuál es su marca favorita y por qué? El debate, como siempre, está abierto.
Fuente: http://goo.gl/gZbvE